Reloj Khépri à Secret Horas con alas.

Hay mucha documentación que atestigua la importancia que tiene la naturaleza en las creaciones de la firma francesa Boucheron, ya sea en sus relojes o joyas, y aunque en su rico patrimonio artístico encontramos tigres, caballos, osos polares… los insectos siempre ocupan un lugar privilegiado en la maison.

Los egipcios representaban al dios del Sol Khépri con la forma de un escarabajo, la escritora francesa Françoise Sagan los llamaba “mensajeros” y  Boucheron crea con ellos magníficas piezas de joyería y relojería en las que juega con la luz y la transparencia.

La firma francesa ha presentado este año una nueva versión de su reloj Khépri à Secret con forma de escarabajo alado con rubíes en lugar de zafiros.

Khépri à Secret es un reloj secreto que encarna la quintaesencia del savoir-faire de la firma francesa en un espacio limitado de poco más de 3 cm.  Boucheron ha adaptado el sistema utilizado por Frédéric Boucheron en una caja con un pájaro en su interior con la que deseaba “bon voyage” a sus clientes. El módulo de animación relojera abre las alas del escarabajo, como si fuera el telón de un escenario, para mostrar su esfera de oro blanco engastada completamente con diamantes y con cuatro rubíes para identificar las 12, 3.6 y 9 horas.

Una ligera presión en la cabeza del escarabajo, formada por un cabujón de rubí, desencadena el baile de las alas y pone en marcha el mecanismo de leva que sincroniza la apertura de las cuatro alas, las dos de arriba de madreperla y las de abajo caladas y tapizadas con diamantes y rubíes.

Este ingenioso sistema de apertura es exclusivo de Boucheron y es una hazaña cómo se han ocultado las 40 piezas en el cuerpo en miniatura del mensajero del tiempo, el lujoso escarabajo adorado por los egipcios.

Boucheron solo ha creado 26 relojes de Khépri à Secret, cuya diminuta caja de oro blanco lleva grabado en el fondo “JE NE SONNE QUE LES HEURES HEUREUSES”. Sus propietarias serán muy afortunadas porque tendrán un reloj joya de gran belleza que será su amuleto porque su mecanismo de cuarzo suizo no tiene intención de pararse en una larga temporada.