El desierto de Eastpak.

Si me hablas de desiertos, mentalmente viajo hasta El Nefud. Veo dunas surcadas por camellos que levantan la arena a su paso. Veo un cielo azul, sin nubes, algunas montañas y la ilusión de un horizonte líquido, como en movimiento.

Es que sigo pensando en esas llanuras áridas, donde conviven ocres, marrones y naranjas y le veo a él, con su túnica blanca y sus maravillosos ojos azules. Creo que pensar en desiertos es pensar en Lawrence de Arabia, en príncipes saudíes, en jaimas, jerifes, turbantes y noches estrelladas.

Así que cuando te dicen que Eastpak trae el desierto a la ciudad, corres a cubrirte, no sea que la arena te envuelva y quedes atrapada por su hipnótico color. Te pones tu ropa cargo, capuchas que no falten y te revistes de un cierto aire de «buff este calor me mata», porque ya se sabe que tener actitud es importante.

Lo cierto es que la marca americana no está sola en este viaje al secano. WOOD WOOD, para más señas: diseño danés aplicado al street wear más actual, ha perfilado esta colección, donde mochilas, bolsas de fin de semana, fundas y otros accesorios, comparten protagonismo con el espíritu nómada del explorador, y el estilo de vida del insider urbano.

Pieles arrugadas, cremalleras con agarre de ante, correas de cuero o de tela gastada, hebillas de metal y mosquetones, hacen el resto.

Para más señas eastpak.com