Fragancia: Prada infusiona el aroma del verano.

Fue en 2007 cuando Prada lanzó una edición limitada de una fragancia llamada ‘Infusion d’Iris’. Fue el comienzo de una colección que, desde aquel año, siempre se ha mantenido como exclusiva, numerada y de una distribución muy localizada. Así, poco a poco fue creciendo, con la incorporación de ‘Infusion de Fleur d’Oranger’ en 2009 e ‘Infusion de Vetiver’ al año siguiente. Este 2015 son ya seis el número de variaciones. Se han incorporado ‘Infusion d’Iris Cedre’, ‘Infusion d’Amande’ y ‘Infusion d’Oeillet’.

La perfumista Daniela Andrier colaboró mano a mano con Miuccia Prada para crear esta elegante y sofisticada colección femenina. Cada una de las fragancias interpreta un ingrediente natural y el resultado pretende ser un contraste entre aroma tradicional y modernidad.

‘Infusion d’Iris’, por ejemplo, se ha creado con acordes de iris, mandarina italiana, neroli tunecino, cedro y benjuí de Laos. De hecho, el neroli está presente en la mayoría de ellas. En la de ‘Fleur d’Oranger’, por ejemplo, le añade azahar de Marruecos, nardo de India y jazmín Sambac. Y en ‘Vetiver’, es esta flor de Haití, con jengibre púrpura, bergamota italiana y rosa turca, además de la flor norafricana.

Más delicada es ‘Iris Cedre’. Parte de los ingredientes de la Infusion original, pero cambiando la mandarina por el incienso de Somalia. Una estela de modernidad que se encuentra también en ‘d’Amande’, con almendra amarha, heliotropo, habas tonka, almizcle y esencia de anís. O en ‘d’Oeillet’, con clavel, sándalo australiano, pachuli de Indonesia y esencia de mandarina.

Entre todas suman 1.200 frascos, por lo que cada una tendrá a la venta unas excasísimas 200 unidades. El precio, sin embargo, sigue la estela de los de otros productos y fragancias de la firma, sin desorbitarse. Así, a partir de julio, que es cuando se ponen a la venta, se podrán conseguir desde 104,50 € (el frasco de 100 ml.).