Ho Chi Minh City: Apartamentos en tres torres de bambú.

El estudio de arquitectos Vo Trong Nghia diseña tres soberbias torres de apartamentos envueltas en bambú en la ciudad de Ho Chi Minh.

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La arquitectura evoluciona como lo hacen las civilizaciones, al calor de sus nuevas necesidades y sus nuevos gustos; la evolución del mundo natural hacia lo urbano ha convertido los paisajes urbanos en vistas universales porque las necesidades de las ciudades son en realidad las mismas, lo son tanto si hablamos de Nueva York como si lo hacemos de Tokio y, en cambio, hay algo que hace a cada ciudad única y diferente, algo como su skyline.

La silueta de las ciudades es inconfundible y convierte en icono a sus edificios más elevados y emblemáticos, se trata de una imagen estática, hierática, que no admite más cambio que los claroscuros que pinta sobre ellos la luz… hasta que un arquitecto construye un nuevo edificio que desdibuja ese skyline delineando uno nuevo.

Ho Chi Minh es una de esas ciudades que amanece cada día bajo el influjo de su skyline, una silueta que cambia cuando Vo Trong Nghia, un estudio de arquitetura vietnamita, construye no una torre sino 3, unidas por su parte superior por un soberbio puente. No son las torres más altas del mundo pero sí representan un modo diferente de entender la aquitectura urbana.

A tres kilómetros y medio del centro de la ciudad, Vo Trong Nghia ha levantado este complejo de tres torres que da cabida a más de 700 familias; el puente que une las tres torres es una especie de corredor verde que tiene su reflejo en toda la fachada porque las tres torres disponen de jardineras y están envueltas en bambú; en una ciudad que rinde cada día más espacio a lo urbano y da la espalda a la naturaleza, este triple edificio es una especie de grito silencioso que pretende concienciar a la ciudad de su necesidad de tender la mano a la naturaleza.

Este complejo de tres torres –Diamond Lotus-, levantado en a lo largo de este año, es el edificio más innovador de la ciudad de Ho Chi Minh.

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Pequeños caprichos que ponen un toque de confort en nuestra rutina. Objetos de mesa o decoración que nos hacen sonreír de puro placer estético y sin los que ya no podríamos estar.

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