12 planes para enamorarse de Áqaba, la perla del mar Rojo.

La ciudad costera de Jordania se presenta hermosa y tranquila, con aguas cristalinas, el mejor ocio y la posibilidad de descubrir lo mejor de Oriente Medio.

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Pocas ciudades tienen el potencial turístico de Áqaba. Los escandinavos han sido los primeros en descubrir esta perla del mar Rojo, la ciudad portuaria y costera de Jordania, en la que los resorts se funden con un paseo marítimo que aun mantiene el encanto local. No es de extrañar que los jordanos acudan cada fin de semana a relajarse allí, con playas hermosas, el marco incomparable del desierto, arrecifes de coral y una vida nocturna que no tiene por qué envidiar al de las islas del Mediterráneo. Te damos 12 imprescindibles, pero hay muchos más para engancharse a esta joya costera de Oriente.

En Loff.it ya te hemos dado algunas referencias hoteleras de Áqaba, como el que posee con playa privada, pero en plena ciudad, la cadena Kempinski, o el Sol Taba, que es el que abrió no hace mucho tiempo la firma española Meliá en la región. Además, será uno de los puertos que cubra el crucero más largo que navegará en 2016, con 126 días de viaje.

Perfecta para el buceo, así como epicentro para todo tipo de excursiones, bien por el desierto del Wadi Rum, acercarse a la ciudad perdida de Petra o, incluso, a los rincones bíblicos como el río Jordán, el lugar del bautismo de Jesús o la propia Ammán; no hay día que no se pueda completar con mil y una actividades en Áqaba.

Ahora es un gran momento para visitarla. La zona es bastante segura, alejada de todo tipo de conflicto. Además, hace un muy buen clima, lejos de los grandes calores del verano, pero con seguridad de poder tomar el sol. Y, por si fuera poco, aun es ajena al turismo masivo de extranjeros, de ahí que no haya perdido su esencia jordana, un atractivo único. A unas dos horas y media del aeropuerto de Ammán, toda una perla por descubrir.

Fotos: Antonio Campoy

  • Playas privadas
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    Playas privadas

    Buena parte de las playas de Áqaba son privadas y pertenecen a los resorts que tienen justo enfrente. Las hay, como la del Kempinski, que se han creado con arena del desierto de Arabia; y no falta la gran playa pública. Si se quiere un plus de lujo, nada como ir unos kilómetros al sur y bañarse justo donde comienza el desierto.

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  • Comida tradicional
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    Comida tradicional

    No faltan buenos restaurantes en los que poder comer una rica comida tradicional jordana. No dejes de pedir los entrantes típicos, como el hummus o el babaganush, pero también las tortas de maíz o la carne de cordero en sus múltiples formas de cocinado.

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  • Mezquitas
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    Mezquitas

    La mezquita principal de la ciudad, en pleno centro histórico, es hermosa, con un gran jardín que es donde los no musulmanes sí tienen acceso. Sin embargo, donde sí es posible acceder, con permiso, es en la más moderna y bella, completamente blanca, de grandes dimensiones, en las afueras de la ciudad. Se trata de la de Sheikh Zayed Bin Sultan Al Nahyan Masjid, toda una hermosura.

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  • Paseo en barco con suelo de cristal
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    Paseo en barco con suelo de cristal

    Una de las actividades más familiares es la de pasear por el Mar Rojo en un barco de suelo de cristal, lo que permite ver el arrecife de coral, la fauna marina del lugar y la limpieza de unas aguas en las que dan muchas ganas de zambullirse.

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  • Una bandera única
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    Una bandera única

    Si hay un detalle que llama la atención del paseo marítimo de Áqaba, ese es una gran bandera con la enseña de la Revolución Árabe (no confundir con la bandera del país). Es tan alta que es la única del mundo que se puede ver al mismo tiempo desde cuatro países: Israel, Egipto, Arabia Saudí y, claro, Jordania.

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  • Un buen pescado
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    Un buen pescado

    Siendo una ciudad costera, nada como disfrutar de una comida o una cena de rico pescado. A la brasa, al papillote… tienen muchas maneras de prepararlo. Una buena idea es ir a comerlo a Captain’s, dicen que el mejor restaurante de pescado de la ciudad.

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  • De marcha en Rakwet
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    De marcha en Rakwet

    Si hay una calle que concentra el ocio y la marcha nocturna de la ciudad, esa es la de la calle AlSa’adeh. Es una de las más occidentalizadas, pero también tiene locales donde poder fumar una shisha si se desea. Restaurantes, discotecas, terrazas al aire libre, cócteles… no falta de nada.

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  • Casa de Sharif Hussein bin Ali
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    Casa de Sharif Hussein bin Ali

    La casa de Sharif Hussein bin Ali permite conocer cómo eran las residencias de los grandes nobles de la región. Situada junto a la antigua Fortaleza, es un museo arqueológico de pequeño tamaño, pero con una buena representación de piezas encontradas en la región.

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  • Fortaleza
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    Fortaleza

    El antiguo castillo de Áqaba es una de las muestras más interesantes en las que poder descubrir el pasado medieval de la ciudad. Algunas de sus puertas están bien conservadas, lo que da buena cuenta de cómo era la vida dentro de la fortaleza.

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  • Buceo en el arrecife
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    Buceo en el arrecife

    El arrecife de coral del mar Rojo lo comparten los buceadores de Áqaba y Eilat, en Israel. Las aguas son turquesas y cristalinas, por lo que permiten disfrutar de la belleza de los mil colores de las plantas y fauna que pueblan el mismo. Hay numerosas empresas que facilitan todo lo necesario para una escapada a las profundidades.

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  • De compras en el mercado
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    De compras en el mercado

    Especias y frutos secos son las especialidades que se pueden encontrar en el mercado central de la ciudad, junto al paseo marítimo y a un paso de la mezquita. La tienda de especias de Al-Baba es muy famosa, así como los frutos secos de Al-Shaaeb.

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  • Cena en el Real Club Náutico.
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    Cena en el Real Club Náutico.

    No hay lugar más lujoso para una cena frente a los yates y barcos más bonitos de los que se anclan en la marina privada de la ciudad. El Real Club Náutico ofrece en su restaurante una gastronomía de altura, con platos tradicionales y el mejor ambiente. Imposible no querer probar su limonada con menta.

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Localización

Más información Turismo de Jordania

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