Un pequeño pulmón verde.
¿No tiene mano con las plantas? ¿Ni sitio donde ponerlas? Cuélguese un jardín vertical.
Excusas típicas para no tener plantas en casa: no tengo mano y se me mueren, no me acuerdo de regarlas y se me secan, las riego demasiado y las ahogo, las pongo al sol y se queman, las pongo a la sombra y se congelan, no tengo terraza, no tengo ventanas, no tengo superficies de apoyo, son un poco caras… ¡Bueno, basta! Si no quiere tenerlas, no las tenga. Pero si las desea de verdad los jardines verticales de Flowerbox están pensados para usted.
Se cuelgan de la pared, así que tiene donde ponerlos ¿no? Pues siga leyendo. Su nueva gama Estabilizada ¡no necesita agua! ¿Cómo se queda? Sus plantitas son naturales, sí, pero, mediante un procedimiento ecológico que no la maltrata, le han extraído la savia natural y la han sustituido por una fórmula similar y biodegradable, una mezcla de glicerina, agua y colorantes alimentarios.
Gracias a la estabilización, su jardín que será eterno, se mostrará siempre fresco. A cambio, no le pedirá nada, ni agua, ni abono, ni luz, ni una temperatura concreta, nada. Sólo procure que no le dé el sol directamente. ¿Qué más? ¡Ah, sí! Fundamental. El precio. Tampoco es excusa porque su nuevo jardín resulta baratísimo. Solo unos 59 euros que incluyen siete años de garantía. ¡Quién le iba a decir que acabaría teniendo jardín en su pisito de 40 metros!
